¿Cómo llegar a tener un “para qué” fuerte? Parte II
En el artículo anterior (este) hablé de Don y Llamada, pero queda incompleto sin lo siguiente:
COMPETENCIA:
En la infoxicación del Propósito, algunas veces, sí que tocan el tema de las Habilidades Adquiridas (que son Destrezas que obtienes por currártelo).
Pero, en los sitios que lo mencionan, lo unen a la Llamada o como parte de cultivar el Talento.
En ocasiones, algo nos termina de gustar por adquirir la Pericia y no al revés.
Y en otras, llegamos al nivel de Expertos en algo sin que tenga que gustarnos.
Para la gente que no ha sentido la Llamada, sumada al Don o la Competencia, esto del Propósito termina siendo como un tipo de “efecto milagro”, equiparable a la picadura de la araña radiactiva o a pillar una barita mágica.
El tema es que hay muchos tipos de Propósitos de Vida.
Están estos que te estoy contando.
Los de Fortalezas (te hablo a continuación).
Y de otros estilos, que puedes ir viendo por aquí.
FORTALEZA:
Es una cualidad o característica que hace que alguien sea fuerte o resistente en una área específica.
Pero también es cuando alguien pasa por un trance, que hace que se desarrollen Competencias no innatas.
La Vida tiene sus planes y te puede mandar mojones aleatorios, pero también regalos.
Algunos de los que nos dedicamos al desarrollo personal pensamos que son lo mismo.
Pero tengo un matiz, no soy de los de: “todo lo malo es un regalo”.
Ojo-cuidao, eso solo lo digo a toro pasao, muy pasao:
cuando has surfeado las emociones que te trajeron,
has ganado resiliencia a costa de la dificultad,
has crecido como persona y
has desarrollado Habilidades internas y/o externas.
Mientras estas en el fango, el fango es fango.
Pensar que el fango es Chanel nº 5, lo mismo es un poco de estar pa’llá con los del happy flower tóxico.
Lo que si tengo es un mantra: “sacaré algo bueno de este ñordo cuando lo supere”.
Para mí, son creencias empoderadoras, que te dan empuje, sin que tengan que ser ciertas del todo.
También tengo otras relacionadas con la espiritualidad que puedes leer aquí.
Volviendo a las Fortalezas.
Vas, tienes tu movida que te hace superarte y te forjas con una.
Pues elevarla a Propósito es: cuando la persona en la que te conviertes, conecta con que el resultado obtenido lo puede Entregar al Mundo.
Es una especie de Talento adquirido, no innato, que viene de la mierda, pero que se transforma en abono para que otros florezcan en la dificultad que pasaste.
To’perro quisqui transita por estas situaciones.
No sé si:
tus Fortalezas te llevarán o han llevado a un Propósito Vital (como fue mi caso),
si lo tienes asegurado por otro lado,
no te interesa el tema o
todo lo contrario (y quieres que lo veamos),
lo que sí te voy a pedir es que:
trates de ver en los marrones de la Vida, los cimientos de tu crecimiento, y no una letrina de experiencias retraumatizantes.
Se me da muy bien hacer esto.
Reescribir tus eventos y que encuentres Fortalezas donde solo había dolor.
Para cambiar recuerdos que se visitan como pesadillas, por músculo para el día a día:
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Un abrazo,
Manu.
PD 1: Freud diría algo por tanta escatología… a mí me interesa que no se te pire y normalices las mierdas (muy de moda en lo que va de década).
PD 2: Con la cantidad de palabras (las que van en cursiva) que tenemos relacionadas con tener un “para qué” fuerte, como que parece que es algo importante, ¿no?
¿Cuál es tú “para qué” fuerte?
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